La ira de los hinchas de Gimnasia impidió que el partido pudiera continuar
El Lobo y Guaymallén sólo jugaron 7 minutos, ya que tras el gol de los Italianos los simpatizantes locales empezaron a generar disturbios y se enfrentaron con la policía.
Una vez más, un grupo de no más de 15 personas logró que cientos de espectadores se quedaran sin ver un partido y, lo que es más grave, que éste ni siquiera se jugara. (Solo se jugaron 7 minutos, en los que Guaymallén ganaba 1 a 0 con el gol de Luciano Varaldo)Todo comenzó tras un gol de Guaymallén que sacó a la luz la tolerancia cero de los hinchas del Lobo, que actuaba como local.
Desde la popular local comenzaron a volar piedras y trozos de ladrillo hacia la hinchada visitante, ubicada sobre la tribuna de la calle Lencinas.Ante el intento de los hinchas mensanas de romper el alambrado que los separaba de los italianos, la policía comenzó a disparar y no demoró en tirar gases lacrimógenos y pimienta. El efecto llegó a todos los rincones del estadio, inclusive hasta los futbolistas, quienes ingresaron rápidamente a los camarines.
Hubo una versión de que el partido se reanudaría cuando desalojaran ambas populares, algo inentendible para los visitantes, quienes no participaron en el conflicto. Así, pagaron justos por pecadores. Desalojadas las populares, y sólo con hinchas en la platea, los futbolistas volvieron a entrar en calor por casi media hora a la espera de conocer la voz del árbitro, quien tras la suspensión no volvió a salir de su camarín hasta retirarse del estadio.
Mientras calentaban, directivos locales advirtieron que no había grupo electrógeno, por lo que no se podían usar las luces. Como, de haberse reanudado, el partido hubiera terminado después de las 21, se decidió confirmar la suspensión después de 50 minutos de que el juego había sido detenido.
Lamentablemente, el árbitro Luis Moreno no quiso dar declaraciones cuando se retiró, luego de dialogar a solas por casi media hora con directivos locales. No contestó a la pregunta de si la suspensión fue por los incidentes, por la falta de luz o por ambas cosas. Aunque para quienes estuvieron en el Víctor Legrotaglie no hay dudas: el partido se detuvo por los graves incidentes entre los Mensanas y la policía.
DIARIO UNO
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